Bogotá, 19 de abril de 2024. Un total de 338 mil personas salieron de la condición de pobreza entre 2022 y 2023, de acuerdo con el informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), que reveló el Índice de Pobreza Multidimensional 2023 (IPM), el cual tuvo se ubicó en 12,1%, es decir 0,8 puntos porcentuales menos que en 2022, cuando fue de 12,9%.
En las cabeceras rurales este indicador quedó en 8,3% con una disminución de 0,4 puntos frente a 2022 (8,7%). En los centros poblados y rural disperso, la reducción fue de 2,2 puntos, al pasar de 27,3% en 2022 a 25,1% en 2023.
Según el Dane, en la medición de la pobreza multidimensional se tienen en cuenta diferentes indicadores, como educación, salud, trabajo, vivienda y acceso a servicios básicos.
Para este informe, la entidad dividió el país en siete regiones: Caribe, Oriental, Central, Pacífico (sin Valle del Cauca), Valle del Cauca, Antioquia y Bogotá.
La disminución más significativa se dio en Valle del Cauca, donde el IPM se redujo en 2,5 puntos porcentuales, pasando de 9,7% en 2022 a 7,2% en 2023. En la región Caribe pasó de 21,4% en 2022 a 20,1% en 2023, con disminución de 1,3 puntos. La región Oriental pasó de 10,7% a 11,1%, con aumento de 0,4 puntos. La región Central pasó de 11,7% a 11,2% el año pasado, con una variación de 0,5 puntos. La región Pacífica disminuyó el IPM en -1,3 puntos, al pasar de 20,7% en 2022 a 19,4% en 2023.
Por su parte, Bogotá redujo el indicador en 0,2 puntos, ya que pasó de 3,8% a 3,6%, y Antioquia disminuyó la pobreza multidimensional 1,2 puntos, al pasar de 10,7 % a 9,5 %.
Indicadores de IPM 2023
-Uno de los cambios más significativo a nivel nacional se dio en el indicador ‘Sin aseguramiento en salud’, con una disminución de 1,7 puntos porcentuales, al pasar de 8,4 % en 2022 a 6,7 % en 2023.
-El Bajo logro educativo’ tuvo reducción de 1,5 puntos, pasando del 40,9 % en 2022 a 39,4 % en 2023.
-En los centros poblados y rural disperso se dieron variaciones significativas en el rubro ‘Sin acceso a fuente de agua mejorada’, que disminuyó 4,0 puntos porcentuales, al pasar de 37,3% en 2022 a 33,3% en 2023.
-Y el indicador ‘Bajo logro educativo’ se redujo -1,9 puntos, al pasar de 71,8 % en 2022 al 69,9 % en 2023.
Incidencia ajustada
Esta variable mide la proporción de privaciones entre las personas consideradas pobres y los cambios que se dan cuando cambia esta condición.
Así, el DANE estableció que, en el total nacional, la mayor contribución al IPM fueron en su orden: educación (35,7%), trabajo (30,0%); niñez y juventud (13,7%); condiciones de la vivienda (12,7%) y salud (8,0%).
En las cabeceras fueron educación (33,9%); trabajo (31,3%); niñez y juventud (14,4%); salud (10,7%) y condiciones de la vivienda (9,7%).
En los centros poblados y rural disperso, las mayores contribuciones fueron de Educación (37,6%); Trabajo (28,6%); Condiciones de la vivienda (15,9%); Niñez y juventud (12,9%), y Salud (5,0%).