Inflación anual sigue bajando lentamente: fue 12,13%, a junio

La salida de las cosechas y el menor precio del dólar provocaron un descenso en los precios de los productos de la canasta familiar. A esto se suman las altas tasas de interés del Banco de la República, que afectan la demanda de los consumidores, generando una reducción de los precios. Además, el alto valor del endeudamiento presiona los costos de producción de las empresas, que requieren préstamos para capital de trabajo.

La cifra de inflación de los últimos 12 meses (12,13%) es levemente inferior a la pronosticada por los diferentes centros de investigación, cuyo promedio era de 12,21%, pero el acumulado del último año es 2,46 puntos porcentuales mayor que el reportado en el mismo periodo del año anterior, cuando fue de 9,67%.

Sin embargo, en comparación con otros años, el descenso de los precios fue inferior en junio pasado, si se tiene en cuenta que la mayoría de los cultivos están en temporada de cosechas, lo que aumenta la oferta y las cotizaciones ceden considerablemente. Pero eso no sucedió en esta oportunidad, al menos en la misma proporción que lo hizo en años anteriores.

«Francamente, cuando uno va al supermercado, no siente que los productos estén bajando mucho, como sucedía antes, a mitad de año» aseguró Bertha Ramírez, una ama de casa consultada por el portal Economía en Serio.

Las mayores disminuciones de precio se reportaron en las subclases: zanahoria (-8,40%), plátano (-6,74%) y papa (-5,40%). Por el contrario, hubo alzas en naranja (12,86%), tomate de árbol (11,21%) y productos derivados de los tubérculos, raíces y plátano (3,85%). En los últimos 12 meses, la inflación de alimentos fue de 14,31%, cifra cada vez más cerca de la inflación anual general.

El sector que más subió los precios en junio pasado fue el transporte (1,08%), debido al incremento del valor de los combustibles, que en los últimos 12 meses se ubicó en 33,98%. Sin embargo, el impacto habría sido peor si el Gobierno hubiera incrementado los precios del diésel, ya que este es el combustible que más usa el transporte público. A las alzas de este rubro le siguieron las de los restaurantes y hoteles (0,56% en junio pasado).

Transcurrida la primera mitad del 2023, la inflación acumulada es de 6,15%, frente a 7,09% del mismo periodo de 2022.

Lo que realmente preocupa es que en los próximos meses los descensos pueden seguir siendo lentos, debido a que las cosechas no serán de la magnitud registrada en junio de los años anteriores, cuando los agricultores tuvieron que salir a las carreteras a regalar algunos productos, especialmente papa.

Adicionalmente, la llegada del fenómeno de El Niño, el cual se extenderá al menos durante los próximos 6 meses, puede afectar los cultivos del segundo semestre, razón por la cual, la oferta se reduciría nuevamente y los precios se mantendrían en los actuales niveles.

Es más, el Gobierno ha dicho que al finalizar el año empezará a incrementar los precios del diésel, cuyo combustible tiene una gran incidencia en el costo del transporte público, y eso puede afectar la inflación al cierre del 2023.

Deja una respuesta