Bogotá, junio de 2024. El mundo del fútbol no solo es apasionante por su juego en la cancha, sino también por los aspectos menos conocidos de cómo sus estrellas gestionan sus ingresos y cumplen con las obligaciones fiscales. En Colombia, país donde el fútbol es una pasión nacional, especialmente durante eventos como la Copa América, es interesante entender cómo los jugadores profesionales manejan sus contratos y sus ingresos tanto nacionales como internacionales dentro del complejo sistema tributario nacional.
Los futbolistas son contratados mediante un contrato laboral que incluye todas las condiciones relacionadas con su desempeño. Este tipo de contrato, regulado por el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA, puede incluir cláusulas especiales como renovaciones obligatorias y premios por rendimiento, basados en goles, asistencias o participaciones en partidos. Según Santiago Arbouin, Socio de CMS Rodríguez-Azuero, especialista en Derecho Tributario, Aduanero & Comercio Exterior, estos ingresos se consideran salario y están sujetos al Impuesto sobre la Renta, con tarifas que oscilan entre el 19% y el 39% según la normativa vigente.
“Entre las cláusulas especiales que puede incluir el contrato de un futbolista, se encuentran la renovación obligatoria al finalizar el documento inicial y los premios basados en el desempeño del jugador. Por ejemplo, un delantero puede recibir incentivos económicos por superar una cantidad específica de goles durante la temporada o por jugar un determinado número de minutos en los partidos. Esto también se aplica al número de asistencias o la cantidad de partidos jugados, ya que estos aspectos se consideran como rendimiento laboral.” afirma Arbouin.
En el contexto colombiano, cambiar de equipo dentro del país no tiene implicaciones fiscales significativas, ya que se considera un movimiento dentro de un contrato laboral estándar. Sin embargo, es fundamental considerar la prima de fichaje, que puede ser tratada como ingreso laboral sujeto a tributación si se paga después de firmar el contrato. Por otro lado, al trasladarse al extranjero para jugar, es esencial verificar si la nueva jurisdicción aplica un «Exit Tax», un impuesto que no existe en Colombia pero que debe ser evaluado cuidadosamente caso por caso.
«La determinación de la tributación de los futbolistas en Colombia se basa en su residencia fiscal. Si un futbolista se convierte en residente fiscal, debe declarar y pagar impuestos sobre todas sus rentas a nivel mundial, cumpliendo con el requisito de permanencia de más de 183 días en el país. Por ejemplo, jugadores como Falcao, que no son residentes fiscales en Colombia, pueden optar por no adquirir esta residencia y tributar solo por sus ingresos de fuente nacional, con una tarifa del 20%. Además, existen otros criterios para conservar la residencia fiscal que deben ser evaluados caso por caso,» explicó María Camila Domínguez, Asociada de CMS Rodríguez-Azuero.
Colombia ha implementado medidas para garantizar el cumplimiento fiscal y combatir la evasión de impuestos, incluyendo la ley 2277 de 2022 que impone sanciones severas, incluida la prisión, para quienes subdeclaran activos. Como miembro del Foro Global de Transparencia e Intercambio de Información de la OCDE, el país participa activamente en el intercambio de información financiera y tributaria entre jurisdicciones, mejorando así su capacidad para detectar ingresos y activos no declarados en el extranjero.
Para los deportistas en Colombia es crucial que evalúen ciertos criterios para optimizar su situación fiscal, como revisar la residencia fiscal considerando criterios como la permanencia, lazos familiares, ingresos y patrimonio. La planificación fiscal estratégica debe maximizar deducciones especiales y aprovechar la renta exenta del 25%, con precaución respecto a las limitaciones sobre los ingresos. Asimismo, la protección patrimonial mediante fideicomisos o sociedades es esencial para garantizar una transmisión eficiente de activos, mientras que la comprensión de las leyes fiscales internacionales y los tratados de doble imposición puede ayudar a mitigar la doble tributación. Finalmente, el cumplimiento riguroso de todas las obligaciones fiscales, tanto en Colombia como en el extranjero, es fundamental para mantener la transparencia y evitar problemas legales.