Campetrol lanza alerta por fuerte caída en demanda de taladros en el país

La Cámara Colombiana de Bienes y Servicios de Petróleo, Gas y Energía (Campetrol) expresó su preocupación por el descenso del uso de taladros de reacondicionamiento. En enero de 2024 se registraron apenas 75 equipos activos, mostrando una reducción de 20,2%, en comparación al mismo mes del año pasado.

El gremio alertó sobre las implicaciones que estas cifras sobre la economía colombiana. La baja producción de petróleo ha ocasionado la pérdida de alrededor 20.000 empleos tanto directos como indirectos. Además, aseguró que otra de las consecuencias para las compañías petroleras es la disminución de la compra y venta de bienes y servicios locales.

Mario Zamora, presidente de Mompos Oil Company, afirmó que, “Con un crecimiento tan bajo como el del año pasado, que apenas alcanzó el 0,6%, y con la inversión siendo el sector más afectado al experimentar una caída cercana al 25%, es más que imprudente continuar con la idea de ponerle freno a la producción de petróleo.”

El Gobierno Nacional se ha referido a una considerable disminución de las arcas del estado por cuenta del descenso de las regalías. Debido al fallo de la Corte Constitucional se dejaría de recibir cerca de 6,5 billones. Sumado a eso, continuar con la idea de disminuir la producción de petróleo reduce de manera gradual los recursos del Estado, dado que el sector representa gran porcentaje de ganancias para la Nación.

El presidente de Mompos Oil Company advirtió está en juego la estabilidad económica y la crucial reactivación de la actividad productiva, necesaria en este momento. Agregó que, “es importante pensar que las grandes diferencias de optimizar contratos vigentes y la firma de un tratado en contra de los combustibles fósiles genera incertidumbre sobre la coherencia de la política energética. Una orientación equilibrada en este momento resulta crucial para asegurar tanto la autosuficiencia como el desarrollo económico del país”.

En resumen, la situación del sector petrolero en Colombia para el año 2024, presenta una reducción preocupante desde contratos y proyectos de exploración, generando impactos negativos en la producción, empleo y economía.