La Unión de Trabajadores de la Industria Petrolera y Energética de Colombia (UTIPEC) expresó su preocupación por los efectos nocivos que han generado en el país, las frecuentes manifestaciones y protestas sindicales de los trabajadores de diferentes empresas petroleras en el departamento del Meta.
A pesar de que reconoce la legitimidad de las aquejas las comunidades que han venido denunciando las dilaciones injustificadas y el incumplimiento de los acuerdos que se hicieron sobre la pavimentación de la vía que conduce al campo Rubiales en el Departamento del Meta, asegura que los paros le han costado al país la pérdida de unos $22.000 millones, debido a que se han dejado de producir unos 50.000 bvarriles diarios de crudo.
Como organización sindical, UTIPEC hizo «un llamado a la Gobernación del Meta y a Ecopetrol particularmente, quienes han hecho oídos sordos a las peticiones que ha elevado la comunidad. Tanto el Gobierno como Ecopetrol se habían comprometido a iniciar la ejecución de la obra desde el pasado mes de diciembre, sin embargo, aún no hay avances en la materia».
La organización sindical, UTIPEC, sostiene que respeta su ideología política, pero manifiesta que no se reclaman ni se exigen derechos poniendo en riesgo los derechos de los demás. «A través de los bloqueos, se han afectado alrededor de seis mil trabajadores que están en esa región, impidiendo el ingreso de alimentos, la evacuación de la producción de los campos, lo que se traduce más de 22 mil millones de pesos en pérdidas. Por tal motivo invita a la comunidad a concertar y llegar a nuevos acuerdos con el Gobierno y Ecopetrol, con el fin de poner fin a los bloqueos e iniciar las obras solicitadas.
Adicionalmente, Alejandro Ospina, Presidente de UTIPEC, asegura que es preocupante la pasividad del Gobierno Nacional y de Ecopetrol frente a la situación que está ocurriendo en el meta, por lo tanto, reclamamos garantías absolutas y serias para poder restablecer la normal circulación por la vía, asimismo que se garantice la seguridad y la libertad de los colombianos que hoy están siendo constreñidos por esos grupos que operan en esta región del país”.