Bogotá, 19 de diciembre de 2024. La reciente decisión del Gobierno Nacional de suspender los subsidios de vivienda del programa Mi Casa Ya representa un duro revés para la economía en general, el sector inmobiliario y para miles de familias colombianas que planeaban adquirir vivienda propia. Desde la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz, Fedelonjas, consideramos que esta medida es, sin duda, perjudicial no sólo por sus implicaciones inmediatas, sino también por sus efectos a largo plazo en la dinámica del mercado inmobiliario.
De acuerdo con proyecciones de Camacol, cerca de 40.000 hogares de estratos 2 y 3 se quedarán sin la posibilidad de acceder al subsidio de cobertura a la tasa de interés. lo que pone en riesgo su capacidad para completar la compra de vivienda. Esto afectará directamente el bolsillo de los colombianos, quienes verán un aumento considerable en los pagos mensuales, dificultando aún más su acceso a vivienda propia. Desde Fedelonjas, nos sumamos a la preocupación del gremio constructor y hacemos un llamado al Gobierno Nacional para que reevalúe esta decisión y considere alternativas que permitan mitigar los posibles efectos económicos y sociales.
“La suspensión de estos subsidios no solo afecta a quienes planeaban adquirir vivienda nueva, sino que también genera efectos colaterales en el sector inmobiliario, incluyendo el mercado de vivienda usada y arrendamientos. La construcción de vivienda nueva es muy relevante, porque cerca del 25% de lo nuevo se destina a inversión para rentar. Aquí hay que tener en cuenta que 89% de los hogares que arriendan viven en estratos 1, 2 y 3”, expresó Mario Ramírez, presidente de Fedelonjas.
Por otro lado, la suspensión de los subsidios podría provocar un aumento en la demanda de inmuebles en arriendo, dado que las familias que no logren acceder a una solución de vivienda propia buscarán alternativas temporales. Esto, sin tener un stock óptimo y adecuado de vivienda usada, podría presionar al alza los precios de los arriendos, especialmente en ciudades intermedias y grandes capitales. Recordemos que cuando una familia adquiere un inmueble nuevo, esto potencia la entrada de dicho inmueble al mercado de usados o arriendo. Por eso, el apoyo estatal, mediante subsidios para el acceso a vivienda, es fundamental para garantizar el equilibrio en el mercado inmobiliario.
“El Gobierno Nacional ha mostrado su disposición para continuar en el corto y largo plazo con este programa social. Esperamos que se encuentre una pronta solución que evite que este programa sea suspendido y termine afectando no solo a las familias colombianas, sino también al empleo y al crecimiento del sector. Fedelonjas reafirma su compromiso de seguir trabajando de la mano con todos los actores del mercado para construir soluciones que beneficien a los colombianos y fortalezcan esta industria que representa una parte muy importante de la economía colombiana”, puntualizó Ramírez.
La suspensión de estos subsidios no solo pone en peligro el sueño de muchas familias de tener un hogar propio, sino que también amenaza con agravar las dificultades económicas de los colombianos más vulnerables. En un momento en el que el acceso a vivienda debería ser una prioridad, la decisión del Gobierno deja en el aire las esperanzas de muchas familias que necesitan de este apoyo para cumplir su anhelo de tener un hogar digno.