Las autoridades colombianas hacen poco o nada para frenar la adulteración de la leche, agregándole lactosuero, un desecho del proceso de elaboración de queso o cuajada que en el campo se lo echan a los marranos. Una investigación, que aún no ha sido divulgada, revela que en el país solo 6 marcas procesadoras de lácteos producen leche sin lactosuero. Mejor dicho, en el mercado hay leche de primera y leche de segunda, sin olvidar que los mayores consumidores de este producto son los niños.