Los protagonistas del debate destaparon sus cifras con anticipación. La discusión se centra en si el amento será de uno o dos dígitos. Analistas creen que superará el 10% y los empresarios piden mesura.
Tres meses ante de definir y entrar en vigencia el salario mínimo que regirá el año entrante, los trabajadores, el Gobierno, los empresarios y los analistas prendieron el debate sobre el porcentaje de incremento, con una línea divisoria muy clara: ¿Uno? o ¿Dos dígitos?
Los empresarios aseguran que la asignación salarial mínima del 2024, debe tener en cuenta un factor muy importante. Se trata de la inflación, cuyo nivel se encuentra en 11,43% y muy seguramente cerrará el 2023 bordeando o, incluso por encima del 10%.
“Volver a un nivel de salario mínimo muy por encima de la inflación, como es lo que ha ocurrido en el año anterior y tras anterior, es contribuir aún más a la inflación», dijo Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco),en el Congreso Nacional del gremio que se realiza en Cali.
Invitó al país y a los responsables «a no adoptar un salario mínimo -ni concertado ni decretado- que tenga un impacto populista, solamente para congraciarse con los trabajadores”.
La afirmación del presidente de Fenalco fue tomada como una respuesta al anuncio hecho hace unos días por el viceministro de Hacienda, Diego Guevara, quien afirmó que el aumento del salario mínimo para el próximo año se ubicaría en dos dígitos. ‘La afirmación de Guevara fue respalda por su jefe, el Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, quien aseguró que la cifra del ajuste estaría por encima del 10%.
El pasado martes, en un encuentro con periodistas económicos, en Bogotá, el Economista en Jefe para la Región Andina de BTG Pactual, Munir Jalil, pronosticó un incremento entre 12% y 13%, y explicó que esto sucederá porque en el país está prohibido subir el salario mínimo por debajo de la inflación, para que los hogares no pierdan poder adquisitivo. Además, a este hay que agregarle la productividad.
Una de las razones para pensar en un aumento de dos dígitos en el salario mínimo, es que la inflación está bajando en menor proporción a lo esperado por las autoridades económicas, debido a que los precios de los alimentos volvieron a repuntar en agosto pasado, producto de la menor cosecha registrada en el primer semestre, tal como lo confirma la cifra negativa del PIB agropecuario entre abril y junio, según el Dane (-1,14% anual).