El Gobierno incrementará el precio del diésel, con el fin de acercarlo al valor de la cotización internacional de este combustible y, de esa manera reducir el déficit del Fondo de Estabilización del Petróleo, que supera los 20 billones de pesos.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, confirmó que el decreto entrará en vigor en agosto próximo y que solo aplica para grandes consumidores del combustible. Esto significa que el ajuste no se reflejará en las estaciones de abastecimiento y, por tanto, no tendrá impacto en la inflación.
La decisión es considerada necesaria por algunos sectores, pero rechazada por los transportadores, especialmente de carga y de pasajeros, ya que la mayoría de estos vehículos usan el acpm para su operación.
El incremento se registra después de casi un año de negociaciones entre el Gobierno y los transportadores, que buscaba un ajuste racional que no impacte los precios de los productos, y no generen presiones inflacionarias.