Bogotá – junio de 2024. La Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) emitieron recientemente una alerta por el comienzo de la temporada de mayor circulación de influenza y otros virus respiratorios en el hemisferio sur de las Américas. Esta situación puede acarrear graves complicaciones, como lo demuestran los datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), que reportaron durante la temporada de influenza 2022-2023 un total de 31 millones de casos, 360,000 hospitalizaciones y 21,000 muertes asociadas con esta enfermedad, en los EE.UU.
La influenza es una enfermedad viral respiratoria altamente contagiosa que representa un riesgo serio para la salud pública, especialmente para grupos vulnerables como mujeres embarazadas, niños pequeños, adultos mayores y personal de la salud. Además, según la OMS, las personas con enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus, afecciones crónicas o cáncer, enfrentan un riesgo considerablemente mayor de sufrir complicaciones relacionadas con la influenza, lo cual subraya la importancia de la vacunación en estas poblaciones.
Los síntomas iniciales de la influenza suelen ser problemas respiratorios comunes, como tos (generalmente seca), dolor de garganta, secreción nasal, fiebre alta, dolores musculares y articulares, así como dolores de cabeza. Sin embargo, en algunos pacientes, la enfermedad puede producir cuadros graves con neumonía, miocarditis, disfunción de múltiples órganos, incluso provocar la muerte.