La adopción de prácticas como la reducción de emisiones, el uso de materiales reciclados y la implementación de principios de circularidad está impulsando una transformación hacia un sector más sostenible. Así es como Logitech se ha unido a esta iniciativa.
Bogotá, junio de 2024 – El informe ‘Tecnologías para el desarrollo sostenible 2024’ del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) destaca que las tecnologías limpias tienen el potencial de reducir las emisiones de CO2 en un 55% para el año 2030. Este pronóstico ha comenzado a materializarse a medida que diversas empresas del sector adoptan estrategias sostenibles en sus procesos de producción, distribución y consumo.
Por ejemplo, la adopción de tecnologías más eficientes en energía, la transición a fuentes de energía renovable, la compensación de carbono a través de proyectos sostenibles, la optimización de la cadena de suministro para reducir la huella de carbono y el fomento del trabajo remoto y la colaboración virtual están reflejando un compromiso creciente con la sostenibilidad ambiental y la reducción del impacto climático de las operaciones de las compañías de tecnología.
“Para el año 2030, en Logitech nos hemos comprometido a reducir nuestra huella de carbono a más de la mitad y neutralizar todas las emisiones residuales, superando así la cantidad de carbono que generamos. Además, nuestro programa de plástico reciclado fomenta el uso de plástico reciclado posconsumo (PCR) en nuestros dispositivos como alternativa al plástico virgen. Continuamente perfeccionamos nuestros empaques para minimizar el impacto ambiental, reduciendo el peso, maximizando el uso de recursos renovables y garantizando la reciclabilidad de nuestros materiales”, aseguró Diego León, Country Manager de Logitech Colombia.
De hecho, desde 2020, la compañía fue la primera empresa de electrónica de consumo en comprometerse a incluir etiquetas de huella de carbono en el empaque de todos los productos de nuestra cartera.
Tal es el caso de la cámara web HD Brio 500, que no solo cuenta con certificación de neutralidad de carbono, sino que también utiliza plástico reciclado posconsumo, aprovechando así materiales procedentes de aparatos electrónicos de consumo para reducir la huella de carbono. Además, su empaque responsable está hecho de papel proveniente de bosques con certificación FSC.
A ello se suma otra línea de productos, como los audífonos Zone Vibe 100 y el mouse Pebble 2, que también cuentan con dicha certificación y empaques responsables, y están diseñados con plástico reciclado posconsumo hasta en un 58 %.
“Es un compromiso de las compañías comenzar no solo a desarrollar productos que mejoren la calidad de vida de las personas, sino también que permitan tener un cuidado más responsable del medio ambiente”, agregó León. “En la actualidad, no basta con ofrecer soluciones innovadoras y eficientes que faciliten la vida cotidiana de nuestros clientes; es igualmente crucial asegurarnos de que nuestras prácticas empresariales y los productos que creamos contribuyan a la preservación y protección del planeta”.
Los estudios han evidenciado la capacidad del sector para ejercer un impacto positivo en la preservación medioambiental, el cual solo puede materializarse a través de la adopción de nuevas prácticas que transformen la dinámica empresarial. Estas prácticas no sólo redefinen la manera en que operan los negocios, sino que también abren las puertas a un horizonte de sostenibilidad y responsabilidad ambiental que resulta fundamental para el futuro.