Bogotá, 21 de mayo de 2024. Para nadie es un secreto que el precio del combustible en Colombia ha aumentado de forma significativa el último año. Por eso los consumidores buscan técnicas para reducir la demanda. Bridgestone, empresa mundial en llantas y caucho que se basa en su experiencia para proporcionar soluciones para una movilidad segura y sostenible, presenta ocho hábitos para ahorrar gasolina y, al mismo tiempo, hacer que su vehículo sea más respetuoso con el medio ambiente:
1. Mantenga las llantas infladas correctamente: Las llantas con presión de inflado insuficiente presentan mayor resistencia al rodamiento, lo que significa mayor trabajo del motor para mover el vehículo. Este esfuerzo extra aumentará el consumo de combustible. Para contar con la presión de inflado adecuada para su vehículo, recomendamos consultar el manual del propietario de su carro para que se asegure de que las llantas están correctamente infladas en todo momento.
2. No exceda la carga: Llevar carga para la cual no está diseñado su vehículo (excesiva) hará que aumente el consumo de combustible más de lo necesario. Además de la rueda de repuesto, las herramientas de emergencia, capacidad máxima de pasajeros o incluso capacidad de carga (en el caso de las camionetas) repercutirá directamente con el consumo de combustible, pero sobre todo afectará la seguridad del vehículo y de sus ocupantes. Su bolsillo se lo agradecerá a la hora de surtir gasolina.
3. No deje su carro “calentando”: ¿Está esperando que su carro se caliente o aguardas a que un amigo se siente en el asiento del copiloto? Sea cual sea el caso, los tiempos prolongados en que el motor está encendido mientras el vehículo está parado requiere de una cantidad sustancial de energía del motor, lo que supone un desperdicio de combustible. Si su auto va a permanecer parado durante más de unos minutos, una de las mejores cosas que puede hacer para mejorar el consumo de gasolina es simplemente apagar el motor.
4. Siga el programa de mantenimiento sugerido por el fabricante del vehículo: Si no sigue adecuadamente el programa de mantenimiento sugerido por el fabricante, usted puede tener efectos adversos en el rendimiento del vehículo. Es muy importante que, por ejemplo, lleve a cabo la rotación y alineación de las llantas cuando sea necesario y haga los cambios regulares de aceite del motor. Si estos mantenimientos no se realizan, el desgaste de algunos componentes del auto pueden provocar, con el tiempo, un aumento en el consumo del combustible.
5. Siempre que sea posible, mantenga una velocidad constante: Los cambios de velocidad frecuentes y drásticos o las aceleraciones y frenadas bruscas y constantes pueden hacer que su vehículo consuma más combustible del necesario. También es importante que practique hábitos de conducción segura, como observar y anticiparse a las acciones de otros vehículos y peatones en la carretera. Hacer esto, puede ayudar a mantener una velocidad constante y evitar así quemar combustible en exceso.
6. Conduzca dentro del límite de velocidad: Conducir dentro del límite de velocidad o por debajo de él, en lugar de hacerlo con exceso de velocidad, cuando viaje por carretera, puede reducir la cantidad de gasolina que necesita su vehículo. Tenga en cuenta que velocidades más altas tienden a hacer que el motor y otros componentes de su auto trabajen más rápido, aumentando el consumo de combustible.
7. Planifique su ruta: Las paradas y arranques del tráfico pueden hacer mella en el depósito de gasolina y en el motor de su vehículo. Para evitarlo, planea la ruta que va a seguir para ahorrar tiempo y dinero en combustible. Puede, por ejemplo, evaluar los informes de tráfico, obras y accidentes antes de salir a la carretera y planear su ruta al detalle para agilizar el trayecto y evitar paradas innecesarias, sobre todo si realiza viajes largos.
8. Conduzca su vehículo con menos frecuencia: A la hora de aprender qué técnicas de conducción pueden ahorrar combustible, quizá la opción más sencilla sea conducir su auto con menos frecuencia. Opte, si es posible, por utilizar el transporte público o utilice un carro compartido. Para viajes más cortos, considere la posibilidad de caminar o ir en bicicleta hasta su destino.