Producir equipos, accesorios y dispositivos tecnológicos con materiales reciclables era una asignatura pendiente de las empresas de tecnología. También se había convertido en un sueño de los defensores del medio ambiente y los promotores de la sostenibilidad.
Pero Logitech, empresa Suiza de tecnología especializada en dispositivos periféricos para computadores, pegó primero. Lleva varios años diseñando y produciendo equipos con materiales energéticamente eficientes, y poniéndose a tono con el impacto ambiental. Esta estrategia sostenible disminuye los residuos electrónicos y contribuye a cerrar la brecha de la obsolescencia programada, que afecta a aquellos productos artificiales que pierden su utilidad en poco tiempo.
No se trata de dispositivos comunes y corrientes sino de productos premium con plástico reciclado. Actualmente, el 60% del portafolio de Logitech es fabricado con materias primas usadas, y está pensado para repararse en lugar de ser desechado.
Además, la compañía es la primera del sector electrónico de consumo en comprometerse a etiquetar sus productos con la huella de carbono correspondiente, y cuenta con una estrategia orientada a alcanzar cero emisiones para 2030, a través de los siguientes 4 pasos:
Realizar diseños con conciencia sostenible en toda la cadena de suministro; fomentar la adopción de electricidad renovable; restaurar las comunidades afectadas por el cambio climático, respaldando proyectos con emisiones bajas: y pensar en la forma de hacer negocios innovando en torno a materiales reciclables.