Los cultivadores de caña rechazaron, a través de su gremio Asocaña, el asesinato de la lideresa indígena Carmelina Yule Paví, en un ataque de un grupo armado ilegal en Toribío, norte del Cauca, en el que también resultaron heridas otras dos personas. «Manifestamos nuestra más enérgica condena hacia estos actos de violencia que, de acuerdo con las comunidades indígenas, se dieron con el agravante del secuestro de un menor de edad de la región, en hechos registrados minutos antes por parte de presuntos integrantes de esas organizaciones ilegales».
\